La Cruz de Benidorm, con vistas a la ciudad de los rascacielos

Situada a unos doscientos metros de altura, en el extremo meridional del Parc Natural de la Serra Gelada, la Cruz de Benidorm es uno de los mejores miradores desde los que asomarse a esta cosmopolita urbe cuyos rascacielos se cuentan entre los más altos de Europa y de la que se suele decir que «nunca duerme».

Hoy vamos a conocer este mirador de fácil acceso y con fantásticas vistas. Por su orientación hacia poniente, un lugar ideal para disfrutar de la puesta de sol con el llamativo skyline de Benidorm y la omnipresente silueta del Puig Campana como telón de fondo.

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El Mirador de la Cruz de Benidorm

El mirador de la Cruz de Benidorm se sitúa en el extremo oriental de la ciudad, por encima del Rincón de Loix y de la Playa de Levante, en el punto donde la apresurada civilización cede su protagonismo al Parque Natural de la Serra Gelada, de gran belleza paisajística y relevancia ambiental.

Al ser Benidorm un destino turístico de primer orden, este mirador suele tener una elevada afluencia de público, siendo visitado tanto por personas que suben a disfrutar de la panorámica como por deportistas que ponen a prueba su condición física, a pie o en bicicleta.

Como ya hemos comentado, este mirador se orienta hacia el Oeste, dominando desde las alturas la Bahía de Benidorm, con la Playa de Levante (la más cercana y popular) y la Playa de Poniente. En el centro de la bahía, dentro del espacio marítimo protegido del Parque Natural de la Serra Gelada se encuentra el fragmento que, según la leyenda, el gigante Roldán arrebató al Puig Campana de una brutal estocada: la siempre atractiva Isla de Benidorm.

Siguiendo la línea costera hacia el sur, más allá del Tossal de la Cala (otro excelente mirador), podemos divisar la silueta de la Torre d’Aguiló, una torre vigía del siglo XVI, parte del sistema defensivo construido para proteger la costa de los ataques de piratas berberiscos. Una torre que podemos visitar en la preciosa ruta de la costa de la Vila Joiosa. Más al fondo, si el día está despejado, se puede divisar la ciudad de Alicante junto al imponente Castillo de Santa Bárbara.

En cuanto a los relieves montañosos, destaca poderosamente la imponente presencia del Puig Campana (1410 m.) con su legendario tajo o «ventana». A la derecha del mismo se aprecia el también llamativo Monte Ponoig (1183 m.).

Mucho más cerca, la gran urbe de Benidorm con sus incontables rascacielos. Un modelo urbanístico que, pese a tener muchos detractores, no debemos olvidar que hace un uso más sostenible de los recursos naturales (energía eléctrica, agua potable) que otros modelos de desarrollo basados en un crecimiento extensivo, como las urbanizaciones de la Marina Alta.

La Travesía de Serra Gelada

La Cruz de Benidorm es el punto donde culmina (o comienza, según el sentido de la marcha) la Travesía de la Serra Gelada, una espectacular ruta de senderismo que recorre esta elevación litoral en toda su extensión, desde el Faro de l’Albir hasta el Alt del Governador (435 m.) y de allí a la cruz. Un vertiginoso itinerario, de dificultad media-alta, que nos permite admirar los acantilados de la sierra en toda su magnitud, caminando en muchos puntos al borde del abismo.

Si queremos realizar una pequeña ruta desde el mirador de la Cruz, tenemos la posibilidad de recorrer parte de esta travesía en sentido inverso hasta alcanzar el Alt de la Montera (307 m.), desde donde se contempla una panorámica mucho más amplia. Se trata de un recorrido de ida y vuelta de algo menos de 4 kilómetros y unos 100 metros de desnivel acumulado. Para realizar esta variante, eso sí, es necesario utilizar calzado de montaña o, al menos, calzado deportivo, debido al terreno irregular que encontramos en el sendero.

Cómo Llegar

Hasta hace un tiempo, era posible subir en coche hasta una pequeña zona de aparcamiento a los pies de la Cruz de Benidorm. Hoy en día, no obstante, el acceso al tráfico está limitado a residentes a partir de la rotonda donde acaba la c/ Sierra Dorada y comienza la Avenida de Tokio (la que nos lleva hasta la cruz). Por ello, nuestro consejo es estacionar el coche más abajo, en la zona de la Avenida del Mediterráneo, y hacer todo el camino a pie. De esta forma podemos aprovechar para visitar la bonita Cala del Tío Ximo o realizar la ruta de la Punta del Cavall (apta para todos los públicos).

Así pues, la mayoría del recorrido hasta la Cruz lo hacemos por camino asfaltado, llegando finalmente a una pequeña explanada a los pies del mirador, donde ya podemos disfrutar de la panorámica. Desde esta pequeña explanada, equipada con algunas mesas de pícnic y bancos, realizamos la subida final por una senda de tierra con escalones de madera, no siendo apto este último tramo para carrito de bebé o silla de ruedas.

A continuación puedes ver el mapa de ubicación de la Cruz de Benidorm, pero ten en cuenta la limitación de acceso en coche.