Viajar en tren es, hoy más que nunca, una forma de moverse con conciencia. Frente a la prisa y el estrés de otros medios de transporte, el tren nos invita a redescubrir el placer del trayecto: mirar por la ventana, leer un buen libro o, simplemente, dejar que el paisaje nos acompañe. Y si además hablamos de trenes de alta velocidad, como los de iryo, la experiencia mejora aún más.
Desde Alicante, gracias a la red de iryo, se abre un abanico de destinos urbanos ideales para escapadas de fin de semana o puentes festivos. Madrid, Cuenca, Albacete, Zaragoza o Valencia están más cerca de lo que imaginas. En este artículo te cuento mi experiencia personal viajando con iryo y te doy ideas y consejos para planificar tu próxima escapada en Tren a Alicante (o desde Alicante), de forma cómoda, rápida y sostenible.
Mi experiencia viajando con iryo desde Alicante
Recientemente probé por primera vez los servicios de iryo en la ruta Alicante-Madrid, y tengo que decir que la experiencia superó mis expectativas. Desde el proceso de reserva online, sencillo e intuitivo, hasta el confort de sus modernos trenes Frecciarossa 1000 de diseño italiano.
Una vez dentro, me llamó la atención el ambiente tranquilo, los amplios asientos y la sensación de espacio. Incluso en la clase más básica, la comodidad es excelente. Hay Wi-Fi gratuito, enchufes en cada asiento, vagón cafetería y un sistema de iluminación ambiental que hace que el viaje sea muy agradable. Además, el trayecto Alicante-Madrid se realiza en poco más de dos horas y media, sin los controles de seguridad ni las esperas de un aeropuerto.
Escapadas en tren: destinos accesibles con iryo desde Alicante
Una de las grandes ventajas de viajar con iryo desde Alicante es que en pocas horas puedes plantarte en el centro de algunas de las ciudades más interesantes del país, sin necesidad de coche y con todas las comodidades a bordo. Aquí van algunas escapadas perfectas para un fin de semana o incluso un puente largo:
Albacete
A menudo olvidada, pero sorprende por su ambiente relajado, buenos parques y una creciente escena gastronómica. Es una escapada sencilla y económica si buscas algo diferente sin alejarte mucho.
Cuenca
Una joya menos transitada, Patrimonio de la Humanidad, perfecta para combinar historia y naturaleza. Puedes visitar las Casas Colgadas, el Museo de Arte Abstracto o hacer una ruta por la Hoz del Júcar. Ideal para quienes buscan una escapada más tranquila.
Madrid
Ideal si buscas cultura, vida nocturna, gastronomía y arte. Puedes dedicar un día a recorrer el eje de los museos (Prado, Reina Sofía, Thyssen), pasear por El Retiro o perderte por barrios como Malasaña o Lavapiés. Además, en menos de tres horas desde Alicante, estás allí.
Zaragoza
Aunque no tiene conexión directa con Alicante, sí que forma parte de la red de iryo, siendo posible llegar desde Madrid o Barcelona. Zaragoza es una ciudad moderna y con un casco antiguo lleno de historia. La Basílica del Pilar, el Palacio de la Aljafería y las riberas del Ebro te esperan. Además, es un destino muy agradecido para explorar caminando.
Valencia
Este destino requiere hacer trasbordo en Cuenca, así que no viene demasiado bien si tu estación de origen es Alicante. Valencia es una ciudad preciosa que merece mucho la pena: puedes disfrutar de su centro histórico, la Ciudad de las Artes y las Ciencias o dar un paseo por la Albufera (contratando una excursión) al atardecer.
Todas estas ciudades tienen estación en el centro urbano, lo que facilita que aproveches el tiempo al máximo desde que bajas del tren. Consejo extra: Puedes combinar estas escapadas con eventos o festivales en cada ciudad (ferias, exposiciones, conciertos) y hacer del viaje una experiencia más completa.
Razones para elegir iryo: sostenibilidad, comodidad y precio
Elegir el tren frente a otros medios de transporte no es solo una cuestión de comodidad, también es un gesto a favor del planeta. Según datos de la propia compañía, los trenes de iryo funcionan con energía 100% renovable, y las emisiones de CO₂ por pasajero son hasta un 80% menores que en coche o avión.
Además, moverse en tren nos permite recuperar el espíritu del “viaje lento”, de disfrutar del trayecto como parte de la experiencia. No hay atascos, no hay controles interminables, y puedes levantarte, estirar las piernas o tomar algo en la cafetería a bordo.
Más allá de la comodidad y la sostenibilidad, el precio es otro de los grandes atractivos de viajar con iryo. Reservando con antelación, es posible encontrar billetes desde unos 18 euros por trayecto, lo que convierte a la alta velocidad en una opción muy competitiva frente al coche o al avión, sin renunciar al confort ni a la flexibilidad.
Cómo planificar tu viaje con iryo
¿Nunca has viajado con iryo? Aquí van algunos consejos prácticos:
Compra online: desde su web o app, con varias tarifas según el tipo de asiento, flexibilidad y servicios incluidos.
Anticipación: si reservas con tiempo puedes encontrar precios muy competitivos (desde unos 18-20€ por trayecto).
Estación de Alicante: la salida se realiza desde la estación de Alacant-Terminal, muy bien comunicada por TRAM, bus y a pie.
Clases y servicios: iryo ofrece cuatro niveles de confort: Inicial, Singular, Singular Only YOU y Infinita, para todos los gustos y presupuestos.
Naturaleza cerca del tren: combina ciudad y senderismo
¿Sabías que hay rutas de senderismo muy cerca de algunas de estas ciudades? Si te apetece combinar cultura y naturaleza, aquí van algunas sugerencias:
Madrid + Sierra de Guadarrama: en tren de cercanías puedes llegar a Cercedilla o El Escorial y hacer rutas increíbles.
Cuenca + Hoces del Júcar: a solo unos minutos de la ciudad, puedes caminar entre hoces y pinares con vistas de vértigo.
Zaragoza + Monasterio de Piedra: a algo más de una hora en bus, una de las joyas naturales más fotogénicas de Aragón.
Valencia + Albufera: una tarde entre arrozales y barcas, ideal para ver la puesta de sol tras un día en la ciudad.
Conclusión: el tren como forma de viajar con sentido
Viajar con iryo desde Alicante es más que trasladarse: es una experiencia cómoda, rápida y sostenible. Te conecta con ciudades llenas de vida, cultura y gastronomía, sin renunciar al descanso ni a la conciencia ambiental. ¿Lo mejor? Que puedes hacerlo en cualquier momento del año, incluso en una simple escapada de fin de semana.
Así que ya lo sabes: la próxima vez que pienses en salir de la rutina, recuerda que el tren te está esperando. Solo tienes que subir, sentarte y dejarte llevar.